miércoles, 20 de noviembre de 2013

Una tarde lluviosa.

Hola.
De nuevo yo (jurando por milésima vez no dejar abandonado este blog).

Bueno, acá en México apenas terminamos de vivir un fin de semana largo (osea puente) y como apenas serán las 2 am y el sueño se me espanto (ilógico lo se), decidí escribir un poquillo.

Este fin de semana fue tranquilo aunque la semana pasada fue algo como una montaña risa donde hubo desde exámenes, cenas hasta altas hora de la madrugada, un par de besos, un poco de alcohol y demás.

Mi vida después de todo no están simplona como pareciera, esta tarde-noche fue uno de esos extraños momentos donde acabas confesando muchas  cosas que ni siquiera tu sabias a ciencia cierta o que te empeñabas a negar; como que un beso robado fue al final correspondido e incluso deseado (aun con ese toque de culpabilidad), que hacer tonterías no mata a nadie, desear no estar sola aun cuando se egoísta quizás no sea tan mal o que existen algunas personas que pueden dar los mejores consejos aunque no lo parezcan.

Uno nunca acaba de conocerse a si mismo y tal vez hasta que no estas seguro de lo que quieres y deseas no estarás listo para tomar decisiones de forma sabia, también puedes descubrir de paso lo cursi y romántica que puedes ser, el pavor que puede generarte el querer a una persona y que detrás de todo ese sarcasmo esta una persona débil y frágil que no quiere ser lastimada.

Quizás solo tenga ganas de demostrar que soy tan humana como cualquiera, que cometo errores, sufro y sonrió como todos solo que no lo demuestro por... por algo llamado necedad.

Me despido con esta canción que espero sea mi nuevo himno.




Porque todos queremos algún día iniciar de cero dejando atrás los errores, inseguridades y todo aquello que nos mantienen aferrados al pasado.



Me despido desde mi pequeña y cómoda habitación deseando que todo inicie de nuevo y encontrarte "tu estúpido y para mi aun inexistente amor", por favor ya no tardes más o terminare por aceptar que el concepto de amar es solo algo cursi que se invento para hacernos sentir menos miserables o para que tengamos algo a que aferrarnos esa casi imaginaria esperanza de todo aquel romántico en completa negación.

Buenos días, creo.

Escribiré pronto.
Besos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario